El programa que le permite a los seres humanos estar en la sociedad, es la educación

sábado, 20 de enero de 2018

¿Dónde está el futuro?
 Por José Eduardo Orozco, Viena-Austria, Enero 2018
Hoy, en pleno siglo XXI, nuestra hermosa nación en otrora, con excelente potencial de crecimiento social, económico y oportunidades para propios y extraños, se hunde entre la desidia, las desproporciones politiqueras, corrupción, narcotráfico, inmoralidad y burla gubernamental.
Una dolorosa realidad golpea el corazón, la mente y el futuro, cuando nuestros jóvenes abandonan sus familias buscando, en otras tierras, mejores oportunidades y los menos afortunados, se quedan viendo su propio mañana de manera incierta al sentir a su lado el fantasma del hambre, la escasez, inseguridad y la probable muerte por falta de medicamentos.
Triste es que la nación de mayor potencial, por sus recursos minerales y puerta de América Latina: Venezuela, agoniza como consecuencia de la estafa producida por quienes la han, más que gobernado, saqueado hasta sus entrañas; esa hermosa geografía que sirvió de inspiración a poetas, autores y cantautores, hoy genera a nivel regional e internacional lástima y comentarios de quienes en el pasado la conocieron y en ella lograron sueños de vida, alegrías y felicidad.
Es increíble, y hasta se convierte en pesadilla pensar y saber que, el territorio de mayor caudal mineral de ésta parte del mundo, no ha tenido en toda su llamada historia democrática, gobierno alguno que haya pensado y trabajado en proyectar a la tierra del más grande parido en América: Simón Bolívar, Simón Rodríguez, de Andrés Bello, Rómulo Gallegos, Fermín Toro, de Aquiles Nazoa, Andrés Eloy Blanco, de Arturo Uslar Pietri, Jacinto Convit, Humberto Fernández Morán y de Simón Díaz entre otros, como la mejor de Latinoamérica, porque todos, sin excepción, ofrecieron por su falta de ética, compromiso, decencia, honestidad, respeto y responsabilidad, espacios para la corrupción, el abuso de poder, las manipulaciones, el tráfico de influencias, y en consecuencia, muchos son los que hoy navegan entre la ignorancia, mediocridad, inmoralidad, irrespeto a las leyes establecidas y hasta detrás de una bolsa o caja de comida.